domingo, 17 de enero de 2010

e-learning 2.0 ¿Por qué más es menos?


He incrustado un vídeo que trata sobre cómo complicamos la vida y cómo una brumadora cantidad de opciones hace que la toma de decisiones se vuelva más compleja y nos produce insatisfacción, pues lo más probable es que siempre haya una opción mejor.

En la entrevista que le hace Eduardo Punset al psicólogo Barry Schwartz no hablan de e-learning 2.0 pero creo que nos permite reflexionar sobre su uso.

Te recomiendo que veas el vídeo y luego continúes con el blog. Dura unos 26 minutos pero merece la pena.

Pongo un ejemplo clásico de vuelta al cole después de vacaciones.

"Tienes que escribir una redacción de tema libre" respecto a "Tienes que escribir una redacción sobre tus vacaciones"

En la segunda opción la redacción casi sale sola mientras que en la primera buena parte del tiempo te lo pasas decidiendo sobre que escribir. Aquellos que escriben un blog o similar saben de lo que hablo.

La diferencia se centra en el número de alternativas, que en el primer caso es ilimitado. Es fácil que luego nos arrepintamos porque siempre hay un tema mejor.

¿Qué podemos aprender que sirva para diseñar cursos e-learning 2.0?

Los humanos necesitamos controlar nuestras vidas, tomar decisiones sobre ella y tener opciones.
Si las opciones son ilimitadas nos llegan a superar y el proceso nos genera insatifacción.

Dicho de otro modo, el esquema en el que mejor nos movemos es el de tener opciones para poder elegir pero pocas para que no se vuelva compleja.

Cuando diseñamos un curso que incluyen herramientas colaborativas, debemos permitir que los alumnos participen, se expresen, colaboren los unos con los otros y que construyan su aprendizaje. Con ello satisfacemos la necesidad de control y de gobernar nuestras vidas.

A su vez, el uso de estas herramientas colaborativas debe estar centrado en actividades concretas que orienten la participación de los alumnos, para así orientarles en su uso y que les permita simplificar como utilizarlas.

Pongo un ejemplo. Todos sabemos que cuando abrimos un foro y dejamos una pregunta muy abierta, la participación de los alumnos es baja. En muchos casos hay que forzar o incentivar su participación. En cambio si la pregunta es más concreta y está relacionada con un aspecto concreto del curso la participación es mayor.

Como conclusión, el uso de las herramientas colaborativas tiene que estar diseñado en el curso para que sea útil y el alumno se pueda sentir satisfecho con sus aportaciones al curso.


¿Qué opinas?

4 comentarios:

  1. Hola Luis, creo que la fuerza del eL 2.0 es su caracter informarl, En este seintido creo que mas que tener en cuenta eL 2.0 en el diseño de un curso, debemos de trabajar con los distintos colectivos para motivarles a utilizar la tecnologia y herramientas 2.0 para aprender. Quiero decir, SlideShare es una maravillosa fuente de aprendizaje, mostremoslo a nustros alumnos!

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  2. Creo que la verdadera fuerza del 2.0 es que sea útil, cómoda y apetecible. El hecho de tener una herramienta no implica su uso. Muchas veces es el mejor método y la gente la usa. Si no aporta, los alumnos, voluntariamente no la usan. Hay que diseñar las actividades para que su uso sea natural y no forzado.

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  3. Tenemos la idea de que cuántas más opciones tengamos para elegir, más libres seremos, pero deberíamos preguntarnos si estamos preparados para renunciar, pues en el fondo elegir es hacer un duelo por el resto de opciones. Tenemos miedo a equivocarnos y ese miedo nos bloquea y entonces no actuamos. Esta situación, si se repite como una pauta de comportamiento nos llevaría a la patología de la eterna duda neurótica, quedándonos anquilosados y con la frustración por no haber elegido. Igual que Sartre nos decía que estamos condenados a ser libres, irremediablemente estamos condenados a elegir; si es que queremos sobrevivir.

    La sociedad tecnológica en la que vivimos tiene gran responsabilidad en ello, queremos lo mejor y lo último,lo más novedoso y lo más actualizado. Hoy puedes comprar un móvil de última generación pero cuando quieras acabar de leer sus instrucciones y lo manejes, ya habrá salido otro modelo más moderno.Esto hace que nuestra capacidad de adaptación tenga que ser continua, por ejemplo en el trabajo cuando ya te habías acostumbrado a una plataforma se cambia por otra más novedosa. Estas situaciones provocan desaliento en nuestras mentes pues nunca llegamos a controlar nuestro entorno y eso lleva a las personas a un estado de ansiedad e insatisfacción irremediables. Pero todo es una paradoja porque lo que hoy se demanda son profesionales con gran capacidad de adaptación al cambio, la cuestión es que no sólo has de tener dicha competencia a nivel laboral sino en el día a día, desde el momento en que compras un tipo de leche, hasta cuando te compras una máquina de fotos, tienes que asumir que esa misma leche no la vuelvas a ver, si no es con muchas más vitaminas y extraños aditivos y desde luego asumir que en la próxima reunión de amigos tu nueva cámara ya será la más antigua.

    En referencia a los cursos de e-learning, considero que el alumno a distancia valora que se le concreten los objetivos y contenidos, dejándole abierta la posibilidad de incrementar conocimientos con materiales complementarios.
    En cierto modo para que la motivación del discente no se vea afectada es preciso que las opciones que deba elegir ( por ejempo: modalidad de evaluación, temáticas sobre las que versar un trabajo...) sean claras y concretas, ya que las pautas no sólo dan formato al curso sino que fomentan una estructura cognitiva en el alumno para que éste no se disperse o se pierda y acabe por abandonar la formación.

    Un saludo
    Pedro Arroyo

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  4. Hola Pedro, estoy de acuerdo contigo y profundizo un poco más en la parte de formación.

    Cuando un alumno empieza un curso tiene que tener claras las normas del juego. Tan simple como el qué, cómo, cuándo y dónde. Además, agradece el por qué.

    Esas normas marcan el entorno de trabajo y facilitan la creación de objetivos internos del alumno. Si utilizamos herramientas de elearning 2.0, también se puede hacer. Si un alumno tiene una actividad grupal y la desarrolla con un wiki, perfecto. Sólo que tiene que conocer los objetivos, tener instrucciones claras sobre lo que se quiere hacer y cómo se evaluará.

    Si ese wiki es un espacio libre y no se va a evaluar, también es correcto.

    Lo no aceptable es "...y los tutores evaluará la participación..."

    Sinceramente, cuando diseño evaluaciones de un curso presencial u on line no valoro la participación o el esfuerzo sino si el alumno ha aprendido o sabe los contenidos.

    No quiero que el cirujano que me opere sea voluntarista, sino que sepa que tiene que hacer.

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